¿De qué manera afecta el estrés a la piel?
Cómo combatir el estrés para que tu piel no tenga problemas
El estrés se vive a diario, cuando estás en el tráfico, la escuela, el trabajo, con preocupaciones, etcétera. Éste no sólo afecta a tu salud, sino también a tu piel, y lo refleja de diferentes maneras, pero no te preocupes, porque algunos productos o tratamientos ayudan a tu dermis a combatirlo.
Por ejemplo, cuando estás viviendo alguna situación estresante, tu cuerpo te pide ayuda de distintas formas: comienzas a sufrir de depresión, angustia, de repente puedes tener ganas de llorar o de gritar, agresividad, cambios de humor, preocupación, ganas de gritar; tics nerviosos, problemas sexuales, beber o fumar en exceso, alteraciones en la memoria y dificultad para concentrarse.
Pero, ¿de qué manera se refleja en la piel? Una de las reacciones más comunes es el acné, pero hay otras enfermedades dermatológicas que afectan a tu dermis.
Síntomas que una piel estresada refleja
Cuando estás pasando por ciertas situaciones que afectan a tu cuerpo, una manera de expresarlo es con estrés. De esta forma, tu cuerpo te dice que algo lo está afectando, pero en el caso de la piel es más visible.
La piel es más vulnerable ante el estrés e inmediatamente se reflejan los daños, por ejemplo, las arrugas, la flacidez, las manchas, la piel apagada y la falta de elasticidad, se apoderan de tu dermis. Asimismo, se obstruyen los poros, la cara se nota deshidratada, hay rojeces, picores y granos.
En otros casos más graves, el estrés en la piel puede causar enfermedades dermatológicas como acné, psoriasis, dermatitis seborreica o atópica, así como excoriaciones y alopecia.
¿Cómo combatir el estrés?
No te satures de trabajo. Debes ser realista y consciente de tus límites, así que procura no sobrecargarte de trabajo.
Cambia tus pensamientos. Cuando llenas tu mente de pensamientos negativos, tu cuerpo recibe esa energía. Lo que hará que reflejes cansancio, hastío o enojo. Así que, por más agobiado que estés, ten pensamientos positivos.
Haz ejercicio. Cuando te ejercitas, tu cuerpo libera endorfinas, que son las hormonas de la felicidad. Esto hará que sientas bienestar, tu tensión nerviosa y estrés desaparecerá.
Duerme bien. Una parte fundamental para que no te sientas irritado es descansar las 8 horas que se recomiendan. Ya que si tienes pérdida de sueño, tu concentración se altera, y por ende, estarás más tenso, irritable.
Organiza tus obligaciones. Trata de jerarquizar tus actividades y organiza tu tiempo. Tal vez creas que todas tus tareas son importantes, pero pensar en todas a la vez sólo te causará agobio y estrés.
En caso de que el estrés esté produciendo daños severos en tu piel, acude con un dermatólogo para que te proporcione el tratamiento adecuado a tu piel. Recuerda, que también la limpieza facial es importante para eliminar otros factores que dañen tu cutis.
Por Flor Vega Castillo